La dotación de centros de cuidados del ictus en la fase aguda en Hungría ha crecido de forma rápida y constante en los últimos siete años. En 2009, existían solamente 16 centros certificados, número que ha crecido hasta 39 en 2016.
Sin embargo, aunque el aumento de los centros de cuidados del ictus es una buena noticia para un país que cuenta con una alta incidencia de casos agudos, se disponía de muy pocos (o prácticamente ninguno) registros o análisis de los datos de tratamiento. Por ejemplo, la estimación de nuevos casos anuales variaba enormemente, de 26 000 a unos 45 000. Esta disparidad es una buena muestra de la falta de datos útiles, lo cual hace que sea prácticamente imposible planificar los recursos futuros y mejorar las prácticas actuales. Por supuesto, poner en marcha sistemas más sólidos lleva tiempo y recursos, dos cosas que el servicio sanitario de Hungría no tenía en abundancia.
Entran en escena dos manos solidarias: Angels Initiative y el registro RES-Q. With the new alliance in place a simple plan was devised to pilot a low-impact method of data collection that wouldn’t put any extra strain on already busy health professionals. En noviembre de 2016, bajo la supervisión y el apoyo del profesor Bereczki, llevamos a cabo una prueba piloto de un mes del proyecto del registro RES-Q en la Clínica de Neurología de la Semmelweis University. Los resultados señalaron una serie de problemas y áreas de mejora. Cuando se llevó a cabo un segundo mes de recogida de datos en enero de 2017, muchos de los errores y omisiones previos se habían corregido.